Alguien dijo alguna vez “para todo mal, el mar, y para todo bien, también”. Una frase que tengo pegada desde chiquilla porque las aventuras acuáticas y yo, hacemos match al 100%. Es por eso que con esta entrada quiero invitarlos a conocer un poco más del mundo submarino.

Nuestra aventura comienza después de una parada necesaria en la Primax de Vía a la Costa para tanquear el carro y comprar uno que otro snack para el camino. A dos horas de Guayaquil, llegamos a un pequeño pueblo llamado Ayangue, compuesto por hermosos paisajes y variada naturaleza. Aunque lo que más resalta de esta pequeña comunidad costera son sus espacios perfectos para realizar actividades en el agua, como pesca, snorkel y, sobre todo, buceo.

Una vez que llegamos al lugar, nos encontramos con nuestro instructor. Es necesario que las personas encargadas de la instrucción sean debidamente certificadas internacionalmente y con experiencia necesaria; ya que al ser un deporte extremo, debes seguir las recomendaciones de tu profesor para estar seguro en todo momento.

Él nos dará indicaciones sobre los lugares que visitaremos, algunas especies que muy posiblemente observaremos y más que nada los protocolos que debemos seguir para tener una exitosa y emocionante experiencia bajo el agua.

En Ecuador hay varios centros de buceo e instructores que ofrecen cursos que van entre los $300 - $400 (dependiendo del nivel). Certificaciones y salidas que oscilan entre $80 - $120. Para los que quieran vivir la experiencia antes de arriesgarse a invertir en una certificación, existe el modelo “Discovery” que te permitirá probar si te gusta bucear, siempre acompañado de un instructor.

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Tips a considerar antes del viaje:

Antes de adentrarnos más en la actividad en sí, es importante dejarles unas recomendaciones sobre qué hacer y cómo preparase para un día de buceo. Todo comienza el día anterior:

- Antes de comenzar con este paseo debes estar bien descansado. Procura dormir 8 horas la noche anterior, porque necesitaras tus baterías al 100%.

- Evita comidas pesadas: sabemos lo rico que es comer un arroz con menestra o una hamburguesa, pero este tipo de comidas no te dejarán dar tu máximo mientas estés buceando.

- Hidrátate bien y no consumas alcohol, sabemos que explicar este punto está demás, jus't don’t.

- Es la playa, así que relax, lleva tu terno de baño, bloqueador solar, gafas, zapatillas cómodas que de lo necesario del buceo, se encargan los demás (según el tour que hayas elegido).

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¡Es hoy, es hoy! ¡A bucear!

Asumiendo que seguiste las indicaciones de preparación para el día anterior, estamos listos para iniciar nuestro día de buceo. El bote zarpa a las 09:00, eso quiere decir que debemos salir de Guayaquil al menos a las 6 de la mañana para tener el tiempo suficiente para llegar al punto de encuentro en Ayangue.

Al igual que la cena del día anterior, el desayuno debe ser ligero (¡nada de bolón, nada de tigrillo, nada de encebollados!) y mantenerse hidratado durante el viaje. Si vas a tomar una pastilla para el mareo, debe ser al menos una hora antes de iniciar el buceo.

Al llegar, el punto de encuentro (y mi restaurante favorito del sector) es el Comedor Martina, nos encontramos con el instructor. Recibiremos la charla de introducción y subiremos al barco. En tan solo 20 minutos nos encontramos con el Islote el Pelado, llamado así debido a que es solo roca, no hay nada de vegetación, por ende está “pelado”. Sin embargo, hay aves y lobos marinos tomando el sol en su superficie.

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Luego de maravillarnos con las especies que viven en el lugar (incluyendo un pingüino solitario al que decidimos llamar “cabito” «véase referencia Madagascar» que es casi dueño de la isla), nos colocamos nuestro equipo.

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Un equipo de buceo consta de: wetsuit, botas, aletas, regulador (de donde salen las mangueras), el tanque de aire, cinturón de peso y máscara. No olvides probártela antes de sumergirte para comprobar que te sientas cómodo, la limpias bien, para evitar que se empañe, se puede usar jabón lavavajillas, shampoo o en el peor de los casos saliva, no querrás perder visión bajo el agua.

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Recuerda que no es necesario ser un nadador experto para bucear, pero es importante estar conscientes de que estaremos en mar abierto, así que es importante poner atención a la charla previa que nos da el instructor sobre el equipo de buceo, las señales básicas que se utilizan bajo el agua, cómo respirar en el nuevo entorno, entre otras indicaciones. Una vez terminado esto, ¡Al agua, pato!

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Alrededor de este islote hay varios puntos de buceo;

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Los que les presentaré hoy son: El Acuario y el Cristo, los puntos más populares para los que inician en este mundo.

El Acuario es perfecto para iniciar, sobretodo si eres nuevo. Tiene una profundidad de 6 metros aproximadamente dependiendo de la marea. Encontrarás mucha fauna acuática, ten cuidado con tus aletas, evita pisar corales y respeta la naturaleza (no te lleves estrellas de mar ni conchitas de “recuerdo” a casa).

El Cristo, ubicado a 11 metros de profundidad, es el punto de buceo más común en Ayangue. Esta estatua del Cristo fue puesto bajo el mar por un empresario colombiano para que funcione como arrecife artificial en la zona y sea un punto turístico. Es más, no puedes salirte del mar sin haber chocado los 5 con “el Yisus”.

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Para un buceo más avanzado, está el sector del barco hundido, este último fue donado por el Instituto Oceanográfico de la Armada, es un atractivo ubicado a 16 metros de profundidad y nadar dentro del estructura oxidada de él te hará sentir como un verdadero explorador.

Una vez terminada la experiencia sales molido pero con el alma feliz.

Aunque uno de los placeres más grandes post buceo del mundo es pegarte un arroz marinero que Martina tiene para ti. Cuesta $10 (puedes pedir la mitad como yo lo hice) y no olvides pedir una porción de arañitas con queso $2.50, luego me lo agradecerás.

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Si estás muy cansado para regresar y piensas que conducir es mala idea, existe la opción de quedarte a dormir. Yo siempre recomiendo el Hotel Tamarindo, tiene cuartos desde $20 por persona, parqueo, wifi, agua caliente y te dejan usar el kayak. Además, cerca de ahí hay varias islas de cocteles, el precio varía entre $3.50 a $8.

Recapitulando los valores:‍

Gasolina de Guayaquil a Ayangue, ida y vuelta $20

• Curso de Buceo Open Water: $300-$400
• Salida de Buceo 2 tanques (para certificados) $80-$90
• Discovery 1 tanque (Experiencia para newies) $60-$100
• Gastronomía $5-$10 por plato
• Cócteles: $3.50-$8 (después de bucear, obvio)
• Si van a dormir: Hostal $20-$30 por persona

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Espero que mis vivencias los empujen a intentar esta maravillosa experiencia. Aún si no quieras sacar una licencia de buceo, este deporte es algo que todos debemos intentar al menos una vez en nuestra vida.

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