¿Acaso somos solo nosotros… o últimamente hace un MEGA calor en Guayaquil? La buena noticia es que nuestro país tiene paisajes y ambientes tan distintos, a tan solo horas de carretera. Así que si también te sientes agobiado por el calor de la Perla… ¡haz maletas! Ecuador tiene tanto por ofrecer.

Si tu plan es acampar y conectarte con la naturaleza, sin duda Las Lagunas de Ozogoche son el plan perfecto para ti. En la provincia de Chimborazo encontrarás una de las lagunas más bonitas del Ecuador. Su clima frío ofrece el escape perfecto para quienes vivimos en el calor guayaco, y el espacio cuenta con una diversidad de flora y fauna espectacular.

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Iniciamos nuestro recorrido en la gasolinera Primax de la Carlos Luis Plaza Dañín. Desde allí salimos hacia nuestra primera parada: Munay Coffee, que queda en el cantón de Colta. Te recomendamos probar el sánduche de pollo, que incluye un café por $3.50. Aquí aprovechamos para recargar energías almorzando y descansando un rato.

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De Colta salimos a las Lagunas de Atillo. Llegamos al mirador de la laguna, donde se puede observar el increíble paisaje, atravesado por la carretera vía Macas – Riobamba. Viajero que se respeta… ¡siempre hace una parada para fotos! En este punto aprovechamos para tomarnos unas excelentes fotos con el paisaje de las lagunas atrás nuestro. A veces puede no parecer importante, pero es la forma en la que estos spots no se pierdan en nuestra memoria. A fin de cuentas, recordar es volver a vivir, ¿verdad?

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Finalmente, nos dirigimos hacia las Lagunas de Ozogoche. En el camino hasta el parqueo podrás observar vacas, caballos, cerdos, ovejas y alpacas. La laguna cuenta con su propio parqueadero custodiado por las personas de la localidad que te cobrarán $5 el día por parquear el carro. Ten en cuenta que si realizas camping te toca pagar por dos días, es decir, $10 en total.

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Llegó el momento de partir del parqueadero hacia la zona de camping de la laguna. El trayecto es de aproximadamente 15 minutos caminando pero te recomendamos contratar a un guía local que te llevará por las partes secas del camino hasta la zona de camping por solo $5. Es muy importante que tu ropa y equipos de camping estén secos. Con eso en cuenta, ¡también te recomendamos que disfrutes del trayecto! Es una caminata en medio de la naturaleza, donde la rutina y los correos se sienten muy muy lejanos. Respirar el aire fresco y disfrutar el paisaje es una experiencia terapéutica.

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Una vez allí: ¡a armar el camping! Preparamos las carpas y un espacio para prender una fogata y entrar en calor. No olvides que debes llevar tu propia comida para la noche y la mañana. Nosotros recomendamos llevar sánduches de jamón y queso o latas de atún. En nuestro caso llevamos ambas. En este tipo de casos, mejor es que sobre a que falte. En el parqueadero también encontrarás dulces o agua que venden los locales así como paseos en caballo hasta la laguna por $5.

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¡Llegamos a las Lagunas de Ozogoche! Aquí empezamos armando las carpas, poniendo los aislantes y sleeping bags para dejar todo listo y poder disfrutar de las lagunas. Una vez todo listo, aprovechamos para meternos en la laguna —la cual estaba demasiado fría —pero vale totalmente la pena. En la noche hicimos una fogata en la cual calentamos malvaviscos y también aprovechamos para calentarnos nosotros y ya ir a dormir.

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Amanecimos con una vista espectacular: los paisajes de la laguna superan la vista de cualquier hotel 5 estrellas. Disfrutamos de nuestro camping, hasta que llegó la hora de volver a casa. Empacamos todo y de regreso a Guayaquil. Ni bien llegamos a casa, y ya comenzamos a planear nuestra próxima aventura por Ecuador.

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